La química de los aceites esenciales es complejo con un aceite individual formado por cientos de diferentes componentes. Estos componentes están agrupados en estas categorías principales:
Ácidos - Anti-inflamatorios
Alcoholes - antisépticos, antivirales, fungicidas, energetizantes.
Aldehídos - anti-inflamatorios, fungicidas, desinfectantes, sedativos.
Cumarinas - sedativos, edificantes, hipotensores (reduce la presión arterial)
Éteres - sedativos, calmantes, anti-espasmódicos, equilibrantes, calmantes.
Cetonas - estimulantes, proporcionan calor.
Lactonas - anti-inflamatorios, espectorantes.
Monoterpenos - estimulantes, proporcionan calor, descongestionantes, expectorantes, antivirales.
Óxidos - antisépticos, expectorantes, estimulantes.
Fenoles - estimulantes, antiinfecciosos, antiespasmódicos, antibacteriales.
Sesquiterpénos - antiinflamatorios, anti-alérgicos, antisépticos, calmantes.
Terpenos - anti-infecciosos, estimulantes, tonificantes, antisépticos, anti-inflamatorios, anti-virales.
Es la combinación única de químicos encontrados en cada planta, la que le da sus características de aroma y propiedades terapéuticas a cada uno de los aceites. La combinación de químicos en cada aceite actúa sinérgicamente, equilibrando y afectando las propiedades de cada uno, de tal manera, que brinda un cambio benéfico en los cuerpos mentales y físicos.
La composición de los aceites esenciales va a diferir dependiendo de que parte de la planta se obtiene el aceite. Los que se obtienen de flores tienen una composición mucho más compleja que los que se obtienen de las hojas, por ejemplo.
Todos los aceites esenciales tienen sus muy independientes características y propiedades. Aunque ciertos aceites pueden usarse directamente y por sí mismos para tratar diferentes desórdenes, van a funcionan mejor cuando se combinan con otros, ya que complementan y destacan las propiedades de los aceites con los que se combinan.
Recuerda que aceites esenciales no es lo mismo que esencias ó que fragancias.